Ligustrum spp. - B5156

Luz solar: Prefiere pleno sol, aunque también tolera semisombra. Cuanto más sol reciba, más denso y sano será el follaje.

Riego: Necesita riegos regulares, manteniendo el sustrato ligeramente húmedo. Tolera periodos cortos de sequía, pero no debe secarse en exceso.

Humedad: Se adapta a diferentes niveles de humedad ambiental, aunque se beneficia de una buena ventilación.

Poda: La poda es fundamental para controlar el vigor y mantener la forma. Tolera podas fuertes, ya que rebota fácilmente desde la madera más vieja. El pinzado regular durante la temporada de crecimiento ayuda a mantener una copa densa.

Fertilización: Abonar de forma regular en primavera y verano con fertilizante equilibrado. Reducir el abonado a finales del verano y suspenderlo en otoño.

Trasplante: Trasplantar cada 2 a 3 años, a comienzos de la primavera. Utilizar un sustrato bien drenado.

Floración y fructificación: Produce pequeñas flores blancas en racimos a finales de la primavera o principios del verano, seguidas de pequeños frutos negros. En bonsái, la floración suele ser discreta, siendo su mayor atractivo el vigor y la facilidad de formación.