Alnus glutinosa - B5412

Luz solar: Prefiere pleno sol, aunque tolera semisombra. La buena luz favorece un crecimiento más compacto y colores intensos.

Riego: Requiere riegos abundantes y regulares. Prefiere sustratos húmedos y no tolera la sequedad prolongada.

Humedad: Agradece ambientes frescos y húmedos con buena ventilación.

Poda: Pode a finales de invierno o después del crecimiento primaveral para controlar el vigor y refinar la estructura.

Fertilización: Abona de primavera a verano con fertilizante equilibrado. Reduce en otoño y suspende en invierno.

Trasplante: Trasplanta cada 2–3 años, en primavera, antes de la brotación. Usa una mezcla húmeda pero bien drenada de akadama, pomice y algo de turba.

Floración: Produce amentos colgantes discretos a finales de invierno, que aportan ligereza y movimiento a la silueta del bonsái.