Ginkgo biloba - B5407

Luz solar: Prefiere pleno sol, aunque tolera la semisombra. La exposición directa al sol realza el color dorado de sus hojas en otoño.

Riego: Mantenga el sustrato ligeramente húmedo, evitando el encharcamiento. Evite períodos prolongados de sequía, especialmente durante el crecimiento activo.

Humedad: Se adapta bien a niveles moderados de humedad. Evite ambientes demasiado secos o excesivamente húmedos.

Poda: Pode después del crecimiento primaveral para mantener la forma deseada. El Ginkgo tiende a crecer de forma vertical, por lo que la poda ayuda a equilibrar su estructura.

Fertilización: Fertilice durante la primavera y el verano con un fertilizante equilibrado para especies de hoja caduca. Reduzca en otoño y evite durante el invierno.

Trasplante: Trasplante cada 3-4 años, preferiblemente en primavera, antes de la aparición de las nuevas hojas. Use un sustrato bien drenado.

Floración: La belleza del Ginkgo biloba reside en su simplicidad y en la transformación dorada de sus hojas, que simbolizan la armonía entre la fuerza y la serenidad a lo largo del tiempo.