

Originaria de la región mediterránea y de Asia occidental, la Punica granatum var. nejikan es una variedad de granado muy apreciada en bonsái por su tronco retorcido de forma natural y su espectacular floración. En verano aparecen flores de color rojo
Envío y plazos de entrega
Política de devolución
Luz solar: Prefiere pleno sol para florecer y fructificar en abundancia. Tolera algo de semisombra ligera, pero la exposición solar directa es esencial para la producción de flores y frutos.
Riego: Necesita riegos regulares durante la temporada de crecimiento, manteniendo el sustrato húmedo pero bien drenado. Evite el encharcamiento, pero no deje que el suelo se seque por completo, especialmente en los días más calurosos.
Humedad: Se adapta bien a diferentes niveles de humedad ambiental, aunque prefiere condiciones moderadas. En climas secos, agradece pulverizaciones ocasionales.
Poda: La poda estructural debe hacerse a finales del invierno o principios de primavera. El pinzado puede realizarse durante la temporada de crecimiento para controlar el tamaño y estimular la ramificación. El tronco retorcido característico del nejikan debe destacarse al diseñar el bonsái.
Fertilización: Abone regularmente en primavera y verano con un fertilizante equilibrado. Para favorecer la floración y fructificación, utilice fertilizantes con mayor contenido en fósforo y potasio. Suspenda el abonado a finales del verano.
Trasplante: Trasplante cada 2 a 3 años, a comienzos de la primavera, antes de la brotación. Use un sustrato fértil y bien drenado.
Floración y fructificación: La Punica granatum nejikan es muy valorada por su abundante floración rojo anaranjada y los pequeños frutos decorativos que aparecen a finales del verano. La combinación del tronco retorcido, las flores vibrantes y las granadas en miniatura la convierten en una de las especies de bonsái más expresivas.
Ficha técnica