Malus everest - B5324

Luz solar: Malus 'Evereste' prefiere una exposición solar plena para una mejor floración y fructificación. Tolera la sombra parcial, pero la producción de frutos será menor.

Riego: Mantenga el sustrato ligeramente húmedo, pero nunca encharcado. Deje que la capa superficial se seque un poco entre riegos. Malus 'Evereste' es relativamente más tolerante a la sequía que otros manzanos ornamentales, pero necesita riego regular, especialmente cuando se cultiva en maceta de bonsái.

Humedad: No es especialmente exigente en cuanto a la humedad, aunque se beneficia de niveles moderados. Normalmente no es necesario utilizar bandejas de humedad, salvo en ambientes muy secos.

Poda: La poda es fundamental para modelar y mantener la forma del bonsái. Pode los brotes nuevos para estimular la ramificación y mantener el tamaño compacto. El alambrado puede realizarse durante la temporada de crecimiento, pero debe hacerse con cuidado para no dañar las ramas.

Fertilización: Fertilice su Malus 'Evereste' durante la temporada de crecimiento (primavera y verano) con un abono equilibrado, soluble en agua. Reduzca o suspenda la fertilización a finales del verano y en otoño.

Trasplante: Trasplante su Malus 'Evereste' cada 2–3 años, preferiblemente a principios de primavera, antes de la brotación de las nuevas hojas. Utilice una mezcla de sustrato para bonsái bien drenada.

Floración y fructificación: Esta variedad es conocida por sus flores blancas, a menudo con tonos rosados en el botón, que aparecen en primavera. Después, produce frutos decorativos — pequeñas manzanas de color rojo a anaranjado que permanecen en el árbol hasta el otoño. Una poda adecuada contribuye a una buena producción de flores y frutos.