La Crataegus monogyna es un árbol o arbusto espinoso originario de Europa, muy apreciado en bonsái por su resistencia, su abundante floración y su capacidad para desarrollar troncos y ramas con gran carácter. Sus hojas son pequeñas, profundamente lobul
Envío y plazos de entrega
Política de devolución
Luz solar: Prefiere pleno sol para un desarrollo sano y una floración abundante. Tolera algo de sombra ligera.
Riego: Necesita riegos regulares, manteniendo el sustrato ligeramente húmedo. Evitar tanto la sequía prolongada como el exceso de agua.
Humedad: Tolera diferentes niveles de humedad ambiental, aunque se beneficia de una buena ventilación.
Poda: La poda estructural debe realizarse en invierno, durante el reposo. El pinzado puede hacerse durante la temporada de crecimiento para controlar el vigor y favorecer la ramificación fina. Es importante tener precaución con las espinas al podar.
Fertilización: Abonar regularmente en primavera y verano con fertilizante equilibrado. Reducir el abonado a finales del verano y suspenderlo en otoño.
Trasplante: Trasplantar cada 2 a 3 años, preferiblemente a comienzos de la primavera, antes de la brotación. Utilizar un sustrato bien drenado.
Floración y fructificación: En primavera, la Crataegus monogyna se cubre de flores blancas que atraen a los polinizadores. En otoño, produce pequeños frutos rojos que permanecen durante un tiempo, aumentando el valor ornamental del bonsái.
Ficha técnica