Carpinus betulus - B5118

Luz solar: Prefiere pleno sol, aunque tolera semisombra. En climas muy cálidos conviene protegerlo del sol fuerte de la tarde.

Riego: Requiere riegos regulares, manteniendo el sustrato húmedo pero sin encharcar. No tolera bien la sequía prolongada.

Humedad: Se adapta bien a niveles medios de humedad y agradece pulverizaciones ocasionales en ambientes secos.

Poda: La poda estructural debe hacerse a finales del invierno o principios de la primavera. Durante la temporada de crecimiento, el pinzado de los nuevos brotes ayuda a controlar el vigor y mantener la forma compacta.

Fertilización: Abona de forma equilibrada en primavera y verano. Reduce o suspende el abonado a finales del verano.

Trasplante: Trasplanta cada 2–3 años, preferiblemente en primavera, usando un sustrato bien drenante como akadama y pomice.

Floración y fructificación: Produce amentos discretos en primavera y pequeños frutos en forma de nuez envueltos en brácteas. Su mayor valor ornamental en bonsái está en el follaje y en el tronco elegante.