Fagus sylvatica - B4263

Luz solar: Prefiere pleno sol a semisombra. La exposición directa ayuda a mantener el vigor y colores otoñales intensos.

Riego: Mantén el sustrato ligeramente húmedo, evitando encharcamientos. Riega más frecuentemente en días calurosos de verano.

Humedad: Prefiere niveles moderados de humedad. Pulverizaciones ocasionales benefician la salud del follaje, especialmente en ambientes secos.

Poda: Poda estructural a finales del invierno, antes de la brotación. Durante el crecimiento, el pinzado ayuda a mantener la forma y estimular la ramificación fina.

Fertilización: Abona desde primavera hasta principios de otoño con fertilizante equilibrado, reduciendo al final del verano.

Trasplante: Trasplanta cada 2–3 años, a comienzos de primavera. Usa un sustrato bien drenante (akadama, pomice y algo de tierra vegetal).

Floración y fructificación: Produce pequeñas flores discretas en primavera, seguidas de semillas aladas. Su principal atractivo está en la forma, el follaje y los colores otoñales.