Originario de Europa, el Crataegus monogyna, conocido como espino alvar, es muy valorado en el mundo del bonsai por su follaje delicado, tronco robusto y floración sutil. Sus hojas verdes se vuelven amarillas o rojizas en otoño, y las pequeñas flores b
Envío y plazos de entrega
Política de devolución
Luz solar: Prefiere pleno sol o sombra parcial. La exposición directa al sol favorece una floración más abundante y hojas más coloridas.
Riego: Mantenga el suelo ligeramente húmedo, evitando el encharcamiento. Un buen drenaje es esencial para el desarrollo saludable de las raíces.
Humedad: Prefiere niveles moderados de humedad. Evite lugares demasiado secos o excesivamente húmedos.
Poda: Pode los brotes que crecen fuera de la forma deseada, especialmente después de la floración, para mantener la armonía y estética del bonsai.
Fertilización: Fertilice durante la primavera y el verano con un fertilizante equilibrado. Reduzca la fertilización en otoño y evite durante el invierno.
Trasplante: Se recomienda trasplantar cada 3-4 años, preferiblemente en primavera, utilizando un sustrato bien drenado adecuado para bonsai de hoja caduca.
Floración: La verdadera belleza del Crataegus monogyna reside en la transformación estacional de sus hojas, la delicadeza de sus flores y el color vibrante de sus frutos, que juntos aportan dinamismo y carácter al bonsai a lo largo del año.
Ficha técnica