Acer palmatum Kiyohime - B1950

Luz solar: Prefiere luz filtrada o sombra parcial, protegiendo las hojas del sol intenso de verano para evitar quemaduras.

Riego: Mantenga el sustrato ligeramente húmedo, evitando el encharcamiento. Un buen drenaje es esencial para la salud de las raíces.

Humedad: Tolera niveles moderados de humedad, pero debe cultivarse en un lugar ventilado para prevenir enfermedades fúngicas.

Poda: Pode después del crecimiento primaveral para mantener la forma y estimular ramificación fina. La poda de mantenimiento puede hacerse durante toda la temporada de crecimiento.

Fertilización: Fertilice durante primavera y verano con fertilizante equilibrado para árboles de hoja caduca. Reduzca en otoño y suspenda en invierno.

Trasplante: Trasplante cada 2–3 años, preferiblemente en primavera, utilizando un sustrato bien drenado.

Floración: La belleza del Acer palmatum 'Kiyohime' se revela en la transformación estacional de sus hojas y en la armonía de colores que transmite delicadeza, equilibrio y serenidad natural.