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Originario de la región mediterránea, el Quercus suber, conocido como alcornoque, es una de las especies más emblemáticas de la flora ibérica y muy apreciada en el mundo del bonsai por su resistencia y por la textura característica de su corteza. Su gr
Envío y plazos de entrega
Política de devolución
Luz solar: Prefiere pleno sol. El alcornoque necesita buena exposición solar para mantener su vigor y crecimiento equilibrado.
Riego: Mantenga el suelo ligeramente húmedo, evitando el exceso de agua. El Quercus suber tolera la sequía, pero no los encharcamientos. Utilice un sustrato bien drenado.
Humedad: Prefiere niveles moderados de humedad. Evite lugares muy húmedos o con poca ventilación.
Poda: Pode las ramas a finales del invierno o comienzos de la primavera para definir la forma deseada. Evite podas drásticas, ya que el alcornoque se recupera lentamente.
Fertilización: Fertilice durante la primavera y el verano con un fertilizante equilibrado. Reduzca la fertilización en otoño y evítela en invierno.
Trasplante: Se recomienda trasplantar cada 3–4 años, preferiblemente en primavera, utilizando una mezcla de suelo bien drenada y adecuada para árboles mediterráneos.
Floración: El Quercus suber no produce flores vistosas, pero puede formar pequeñas bellotas. La textura de la corteza y la forma del tronco son los principales elementos distintivos de este bonsai.
Ficha técnica